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| Foto MythicSeabass vía flickr |
Durante el verano, sobretodo cuando estamos de vacaciones con ellos, todo son paseos largos, por la playa, por nuestro parque preferido de la ciudad o por la montaña. Pasamos más tiempo al día con ellos al tener jornada intensiva o días de vacaciones.
Estas son cuatro posibles consecuencias del estrés post-vacacional en perros, y por si tu perro experimentara alguna de ellas también os dejamos algunos consejos.
1- Se ha vuelto hacer pis en casa.
No es raro que un perro que ya sabía cuando debía hacer sus necesidades se vea confundido por los cambios de horario y necesitará volver a habituarse. Igual que cuando se está enseñando a un cachorro, hay que tener paciencia, intenta sacarlo un poco más menudo y ira recuperando la rutina.2- Intenta llamar más tu atención.
Si durante las vacaciones ha estado con mucha gente, y todos le decían cosas y le hacían hacer trucos es probable que ahora quiera estar más con nosotros, y mucho más los bóxer que son tan cariñosos. Igual que si dejas a tu hijo con los abuelos, a la vuelta tendrás que ir reajustando la situación poco a poco.3- Cuando se queda solo en casa destroza cosas o no para de ladrar, gemir o llorar.
Algunos perros lo pasan mal cuando llevan todo el verano pasando muchas más horas con sus dueño y de repente tienen que volver a tu rutina de vuelta al trabajo. Esto podría desembocar en un “trastorno de ansiedad por separación”, un problema al que hay que poner solución cuanto antes. Estos perros suelen causar destrozos como manera de liberar su estrés. Es importante habituar al perro a quedarse solo en casa, seguir los mismos rituales antes de salir que hacías antes de verano. Si el problema se agravara y no se solucionase en un par de días, es recomendable acudir a experto en comportamiento canino para ayudarte a solucionarlo.4- Demasiada energía.
Cuando lleva las todas las vacaciones con mucha actividad, paseos, juegos etc. es normal que los primeros días tenga energía de más. Intenta que la vuelta a la rutina no sea muy drástica, aprovecha las mañanas antes de irte a trabajar o las noches de septiembre que todavía anochece tarde para jugar con el a la pelota o con su juguete favorito. Lo mejor para descargar energía son unas buenas carreras y jugar con otros perros. Eso hará que esté más relajado y aceptará de mejor manera que tengamos que ir a trabajar.En resumen os dejamos esta frase de Sabina Artal de Dogged Adiestramiento Canino que engloba todo lo que podemos hacer por nuestros amigos peludos, "Debemos intentar no reducir nuestras atenciones de hoy a mañana, intentemos prestarle una atención intermedia, saquémosle tanto como se merece y nos podamos permitir… ayudémosle a que su vuelta a la rutina sea gradual y mas tolerable, y démosle esos pequeños momentos de “ocio” que nos hacen soñar a todos con el siguiente periodo vacacional… o al menos con el ¡fin de semana!"
